En el mundo de la fotografía, la fotografía inmobiliaria ha tomado mucha fuerza y hemos pasado de ver fotos en Idealista de casas con las cocinas ¡llenas de cacharros¡ o ¡camas sin hacer! a ver fotografías donde se muestran los espacio impolutos, sacando partido a cada rincón del inmueble que está puesto en venta o alquiler.
La fotografía es una herramienta fundamental en el sector inmobiliario, ya que permite mostrar de manera visual y muy atractiva las características de una propiedad. Las imágenes son la primera impresión que un potencial comprador tendrá de un inmueble, y pueden ser determinantes a la hora de tomar una decisión de compra. En este post, vamos a hablar sobre algunas recomendaciones para hacer fotografías de calidad que ayuden a vender casas, pisos e inmuebles.
1. Preparación previa
Antes de empezar a tomar fotografías, es importante que se realice una preparación previa de la vivienda. Aunque parezca obvio, esto implica limpiar y ordenar todos los espacios, quitando todos los objetos que puedan molestar a la vista, y, si es necesario, comprar o alquilar algunos objetos que ayuden a potenciar espacios y mejoren la apariencia de la vivienda.
2. Equipamiento
Es importante contar con el equipamiento adecuado para tomar fotografías de calidad. Aunque hoy en día los Smartphone dan una gran calidad de la imagen, a la hora de fotografiar una vivienda seguramente nos vamos a encontrar espacios con mucha diferencia de luz. En un salón, probablemente haya mucha luz al lado de una ventana y en el lado opuesto la luz será menor, por lo que compensar esa exposición con un teléfono móvil es posible que no lo logremos.
Si quieres realizar una buena fotografía inmobiliaria deberás invertir en una cámara réflex o una cámara sin espejo.
También se hace imprescindible utilizar un trípode para evitar movimientos indeseados, asegurarse de que la imagen esté completamente enfocada y tener la posibilidad de realizar varias tomas con distinta exposición para luego superponerlas en nuestro programa de edición.
Y en cuanto al objetivo, tendrás que utilizar un angular y siempre pensando en no distorsionar las líneas ni crear un espacio no real. Evitaremos el uso de objetivos de “ojo de pez” porque distorsionan por completo el espacio y la perspectiva.
3. Luz
La luz es uno de los factores más importantes que debe tener en cuenta un fotógrafo inmobiliario. Se recomienda utilizar luz natural en la medida de lo posible, ya que permite mostrar la verdadera apariencia de la vivienda. En caso de no disponer de luz natural suficiente, se pueden utilizar luces artificiales como las propias lámparas y luces de la casa o bien llevar tu propio flash o luz continua. Es importante tener en cuenta que la luz debe estar distribuida de manera uniforme para evitar sombras excesivas y si utilizamos flash habrá que tener en cuenta el balance de blancos y el color de la luz que tendremos en la zona donde entre la luz natural vs la luz que no dan las lámparas o el flash.
4. La toma
Uno de los momentos decisivos. Una vez bien planeada la sesión y ordenada y decorada la vivienda, realizaremos las fotografías.
Para ello conviene utilizar flash para poder tirar a ISO bajo y poder editar la fotografía con garantías de que no hará ruido y no perderá calidad.
Será importante utilizar un diafragma abierto, con un “f” alto para poder tener el mayor espacio enfocado, sin abusar de la profundidad de campo ni desenfoques muy agresivos, a no ser que queramos poner la atención en algún detalle, en algún encuentro de materiales o punto concreto de la vivienda.
Una vez tengamos el diafragma y el ISO correctos, ajustaremos la velocidad de disparo. En ocasiones (muchas) esta velocidad puede ser muy baja por lo que se hace imprescindible el uso de trípode y se recomienda el uso también de un disparador, para evitar posibles vibraciones a a la hora de pulsar el “botón de disparo” de la cámara. Si no dispones de disparador, puedes configurar la cámara el “disparo con retardo”.
Para fotografía inmobiliaria tendrás que utilizar un objetivo angular. Recomiendo no utilizar nunca algo más bajo de un 14mm porque a partir de ahí se distorsiona mucho la imagen y aunque tengamos margen para editar la fotografía y corregir líneas y perspectivas, podemos ofrecer una imagen algo errónea de lo que en sí el espacio.
Recuerda que la toma siempre debe ser en RAW.
5. Detalles
Los detalles son importantes a la hora de mostrar las características de una casa. Es recomendable tomar fotografías de los espacios más destacados de la propiedad, como pueden ser la cocina, el baño, el salón o el jardín y también es importante mostrar los detalles más relevantes, como pueden ser las vistas desde la ventana, la altura del techo, o los acabados y materiales utilizados.
Normalmente si es un trabajo para una inmobiliaria, necesitarán también una fotografía de la fachada y de la calle o entorno donde se sitúa la vivienda.
6. Posproducción
La postproducción es el proceso de edición de las fotografías para mejorarlas y corregir posibles errores. Es recomendable utilizar software de edición de imágenes como Adobe Lightroom o Photoshop para ajustar la exposición, la nitidez de la imagen y corregir las distorsiones que suelen tener las fotografías tomadas con un objetivo angular.
En mi caso utilizo Lightroom y para unir fotografías con diferentes exposiciones Photomecanix Pro, que lo tengo integrado en el mismo LR y el flujo de trabajo es muy cómodo.
Hoy en día la mayoría de las imágenes se usan para web o redes sociales por lo que las imágenes siempre las exporto en jpeg y las entrego tanto en HD como en baja resolución, listas ya para que el cliente pueda subirlas sin tener que perder tiempo.
7. Disfruta
Y siempre que puedas, ¡disfruta! y llévate algo de material para compartir en tus redes sociales. Ya sabes, hagas lo que hagas, cúentaselo al mundo